Perder la Ética
Desde hace años la Medicina se fundamenta sobre una base ética de respeto hacia el paciente. En la práctica estos principios bioéticos quedan bastante bien representados en la Declaración de Lisboa aprobada por la WMA en el año 1981 y revisada en 1995.
El primero de los principios bioéticos sobre los que se debe regir la relación médico-paciente está planteado así:
1.- Derecho a la atención médica de buena calidad
a.- Toda persona tiene derecho, sin discriminación, a una atención médica apropiada.
b.- Todo paciente tiene derecho a ser atendido por un médico que él sepa que tiene libertad para dar una opinión clínica y ética, sin ninguna interferencia exterior.
c.- El paciente siempre debe ser tratado respetando sus mejores intereses. El tratamiento aplicado debe ser conforme a los principios médicos generalmente aprobados.
d.- La seguridad de la calidad siempre debe ser parte de la atención médica y los médicos, en especial, deben aceptar la responsabilidad de ser los guardianes de la calidad de los servicios médicos.
e.- En circunstancias cuando se debe elegir entre pacientes potenciales para un tratamiento particular, el que es limitado, todos esos pacientes tienen derecho a una selección justa para ese tratamiento. Dicha elección debe estar basada en criterios médicos y debe hacerse sin discriminación.
f.- El paciente tiene derecho a una atención médica continua. El médico tiene la obligación de cooperar en la coordinación de la atención médicamente indicada, con otro personal de salud que trata al paciente. El médico puede no discontinuar el tratamiento de un paciente mientras se necesite más tratamiento indicado médicamente, sin proporcionar al paciente ayuda razonable y oportunidad suficiente para hacer los arreglos alternativos para la atención.
Lamentablemente entre la clase médica también hay enfermos, en este caso enfermos de intolerancia, psicopatía o vaya usted a saber de qué. Normalmente no entro en juegos políticos, ni religiosos; no es ese el sentido de este blog.
Este es el cartel que colgó un urólogo de Florida en la puerta de su consulta:
Si votaste por Obama...
busca cuidados urológicos
en alguna otra parte
Los cambios en tú sanidad
comienzan ahora
no en cuatro años
El tipo en cuestión se llama Jack Cassell y sinceramente me alegraría sobremanera que finalmente algún tribunal le retirase la licencia para ejercer. No porque a mi que caiga bien Obama, sino porque este sujeto es un peligro. A saber cómo tratara a los pacientes dentro de su ámbito privado cuando de cara al público vulnera de forma tan flagrante todos los aspectos éticos de la relación médico-paciente.
Yo personalmente no quiero que la Medicina se pueda identificar con individuos como Jack Cassell, me pregunto si realmente todavía existen médicos como los de la Alemania Nazi y si el bueno de Jack será uno de ellos. Por cierto, no se os olvide su cara, por si algún día necesitáis un urólogo y se os cruza por la calle, no vaya a ser que se os ocurra mencionarle que sois socialistas y os haga "un trabajito" en los bajos.
Lo más impresionante es que los medios de comunicación americanos en vez de mostrarse contrarios a la actitud del médico en cuestión, les ha dado por preguntarse si lo que hace es posible o no. La legalidad en este caso no debe ser impedimento para que reciba una expeditiva amonestación.
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