¿Te gustaría infectarte de Gripe A?

Aunque la respuesta obvia es no, un videojuego acaba de demostrar que no todos pensamos igual.

World of Warcraft, uno de los juegos online más exitosos en la actualidad, con más de 11 millones de usuarios de pago, es un mundo virtual paralelo donde a diario millones de jugadores virtuales se interrelacionan y pelean.

¿Se os ocurre un lugar mejor para hacer estudios epidémicos?

En en año 2005, los desarrolladores de World of Warcraft añadieron una nueva mazmorra, donde habitaba un ser fantástico con un poder especial, era capaz de infectar al personaje virtual con un virus que iba matándolo poco a poco. Sin embargo, los diseñadores programaron el juego de modo que el virus sólo afectaría a los personajes mientras permanecieran en la mazmorra.

Sin embargo, Sangre Corrupta, que así llamaron al virus, logró escapar de la cueva gracias a que los usuarios descubrieron un fallo de programación. De este modo el virus virtual comenzó a expandirse por el juego. En cuestión de horas el virus llegó a las grandes ciudades y comenzó a matar a los jugadores más débiles, sin embargo los más fuertes ayudaron a expandir el virus al moverse mientras estaban infectados.

Durante varios días, las calles de las principales ciudades estaban cubiertas por esqueletos de personajes muertos. Lo interesante de todo esto, es que puede ayudar a los epidemiólogos a comprender el comportamiento y la difusión de enfermedades infecciosas de un modo que ningún modelo computacional podría hacer.

El "factor estúpido", como se le denominó, hizo que muchos jugadores se infectaran de manera intencionada para ayudar a diseminar la enfermedad por zonas que antes no estaban afectadas; otros se infectaron involuntariamente por acercarse a zonas de riesgo. Para Fefferman, epidemiólogo, la actitud de muchos jugadores se asemeja con los comportamientos de la gente en la vida real, "me acercaré un poco a echar un vistazo y no me infectaré". Y esto es algo que ningún ordenador podría imaginar cuando simula los mecanismos de expansión de una enfermedad infecciosa.

¿Podrían los videojuegos online ayudar a comprender el comportamiento real de los humanos?

Los fallos de programación se arreglaron y pronto el virus volvió a su mazmorra, sin embargo, de esta experiencia surgieron muchas dudas sobre el comportamiento antisocial que llevó a cientos de jugadores a colaborar en la expansión del virus. De aquí pueden salir además visiones de futuro sobre como grupos terroristas podrían actuar para causar una alerta pandémica en el MundoReal.

Habrá que estar alerta por si se presentan nuevas ocasiones para observar otros experimentos sociales espontáneos.

Visto en Health research in virtual worlds

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